POTAJE DE SEMANA SANTA
Entre los platos más típicos de Semana Santa, junto con las torrijas, está el potaje. Un alimento que aporta mucha energía por las legumbres, la fibra de las verduras y las vitaminas del bacalao. No hay Semana Santa sin un buen potaje.
INGREDIENTES (para 8 porciones):
300 gramos de garbanzos seco
300 gramos bacalao fresco sin piel
200 gramos de espinacas o acelgas
2 cebollas pequeñas
3 dientes de ajo
2 huevos
Una rebanada de pan frito
2 hojas de laurel
Aceite de oliva
Sal
Pimienta
1 cuchara de postre de pimentón dulce
Vino blanco
PREPARACIÓN
Ponemos a cocer en una olla los garbanzos previamente hidratados (12 horas con un poco de sal, unos granos de pimienta negra y una hoja de laurel). Se cocerán durante una hora y media aproximadamente hasta que el garbanzo tenga la textura deseada.
Por otro lado, preparamos el sofrito que será reservado para más adelante; en una sartén con un chorro no muy excesivo de aceite de oliva una vez caliente doraremos los tres dientes de ajo, dos picados y uno entero, una vez dorado el ajo, retiramos el diente de ajo entero e incorporamos las dos cebollas bien picadas en brunoise, dejamos que se sofría bien todo.
Una vez pochadas las verduras retiramos del fuego y dejamos atemperar, con la intención de añadir el pimentón. De otra forma el pimentón se quemaría y como saben amargaría y daría mal sabor.
En la olla de los garbanzos añadimos las espinacas o las acelgas para que se cuezan en diez minutos, durante ese tiempo cocemos los huevos en un cazo aparte con agua. Reservamos.
Cuando se cueza la espinaca se añade el bacalao en trozos de un bocado y se introduce el sofrito, dándole movimiento de vaivén a la olla para mezclar bien todos los ingredientes.
Para acabar el guiso hacemos un majado con el ajo entero que retiramos, la rebanada de pan frito y aceite de oliva virgen, el cual se incorporará al guiso junto con el huevo cocido y picado no muy fino.
Servimos y a comer.