SALSA ROQUEFORT
La salsa roquefort es una salsa muy sencilla de preparar, que se emplea normalmente para servir junto a recetas de carne, siendo las recetas más conocidas el solomillo al roquefort o la pechuga de pollo al roquefort. Es una salsa que se puede emplear también para servirla junto a platos de pasta, con la que combina muy bien, e incluso con algunas recetas de pescado o ensalada, por lo que resulta una salsa realmente versátil.
INGREDIENTES :
100 gramos de queso roquefort
400 ml de nata para cocinar
Nuez moscada (Opcional)
PREPARACIÓN
Vamos a poner a calentar un cacito a fuego suave, con la nata para cocinar vertida en el mismo para ir calentándola. Es importante mantener siempre el fuego más bien suave, para que no hierva la nata.
A continuación vamos a trocear el queso roquefort, el cual podemos encontrar fácilmente en cualquier supermercado, y podemos elegir el que más nos guste, teniendo en cuenta que hay algunos que resultan más suaves y otros tienen un sabor más intenso. Una vez lo hemos troceado, lo agregamos al cazo y comenzamos a removerlo para que se vaya fundiendo junto a la nata a medida que se vaya calentando.
De forma opcional podemos agregar un toque de nuez moscada a la salsa roquefort, para darle un toque extra de sabor.
Mantenemos en el cazo removiendo la mezcla hasta que se haya fundido todo el roquefort y se haya formado una salsa homogénea, en ese momento ya podemos retirar del fuego y servirla o bien reservarla hasta la hora de necesitarla.
Si la vas a emplear en un plato frío, métela en la nevera para enfriarla bien. Puedes ajustar la textura y el sabor de la misma a tus gustos, lo que se hace empleando más cantidad de nata o roquefort, según te guste más o menos sabrosa y más o menos líquida.