GALLETAS SALADAS DE PIPAS
Estas galletas saladas de pipas son una receta saludable que nos proporcionará un bocado increíble para picar entre horas. Una de esas meriendas o aperitivos que podemos tener siempre listo.
INGREDIENTES (para 8 porciones):
250 gr de harina de fuerza
100 gr de aceite
90 ml de agua
70 gr de pipas peladas
1 cucharada de sal
PREPARACIÓN
Tamizamos la harina y la colocamos en el un bol. De esta manera nos quedarán unas galletas mucho más finas, sin ningún grumo.
Hacemos una especie de volcán y le ponemos en el centro el aceite. Mezclamos antes de la llegada del agua. Nos deberá quedar una masa esponjosa y flexible.
Añadimos una pizca de sal para conseguir que nos quede marcado ese sabor salado que queremos conseguir.
Cuando tenemos una masa lo más homogénea posible, será el turno de las pipas. Para estas galletas saladas usaremos unas pipas peladas.
Como cualquier receta de este tipo, admite infinidad de combinaciones posibles. Podemos añadir unas semillas de sésamo o queso rallado. Las pipas quedarán también bien con unas finas hierbas.
La masa tendrá el sabor que le queramos dar. Simplemente nos aseguramos de que nos queden todos los ingredientes bien integrados.
Enharinamos la superficie de trabajo y extendemos la masa. Nos deberá quedar una lámina lo más fina posible, la grandeza de estas galletas es su sabor crujiente.
Le damos forma, cortamos con un cortapastas o con un vaso. Nos quedarán unas galletas redondas o cuadraras impresionantes.
Colocamos las galletas en una fuente para horno forrada con papel de horno o engrasada para que no se peguen.
Por encima de cada galleta colocamos unas pipas más o semillas. Dejamos que reposen mientras se precalienta el horno a 180º.
Horneamos las galletas durante unos 15 minutos. Cuando veamos que están listas, retiramos del horno y esperamos a que se enfríen.